En un mundo en el que parece nos “imponen” un canon de belleza preestablecido, que exige la perfección del cuerpo, simetría del rostro, tener los ojos rasgados, contar con unos labios gruesos y seductores, pómulos elevados… El término francés de moda, jolie laide, viene a decirnos que la personalidad unida a una belleza más atípica, puede convertirte igualmente en una mujer arrebatadora.
¿De dónde proviene el término Jolie Laide?
Este término de origen desconocido, es adjudicado por la cultura francesa a la canción “Laide Jolie Laide” del músico Serge Gainsbourg, músico que, no siendo especialmente atractivo, consiguió conquistar a bellezas como Jane Birkin (con la que tuvo la relación más larga), Brigitte Bardot, y otras celebrities. Es el término en inglés conocido como “beautiful ugly”.
Así, estas bellas palabras vienen a definir a esas mujeres ( y por qué no, también hombres) que, alejadas aparentemente de los cánones de belleza, e incluso señaladas por la sociedad, como “feas”, lejos de serlo, pasan de “patitos feos” a hermosos cisnes, gracias a unos rasgos únicos y una personalidad arrebatadora.
Ejemplos hay cientos: Anjelica Huston, Sofia Coppola, la propia Charlotte Gainsbourg (hija del músico Serge Gainsbourg y Jane Birkin), Meryl Streep, Frida Kalho, Bárbara Streisand… o nuestra Rosi de Palma.
Hay “jolie laides” en campos profesionales a priori muy exigentes con la estética, encontrándonos muchas de ellas en el cine, la moda y la televisión.
Son mujeres con apariencia larguirucha, andróginas, con ojos demasiado juntos, narices irregulares o rostros asimétricos… pero que en conjunto poseen algo único.

¿Solo hay jolie laide femeninas?
La respuesta es no. Entre “ellos” también los hay: Gerard Depardieu, Willem Dafoe, Adrien Brody, el propio Serge Gainsbourg o nuestro Javier Bardem.
Porque, ¿qué es la belleza sino la forma en la que te perciben los demás y te percibes tú mismo/a? ¿Cómo y cuántas veces han cambiado los cánones de belleza a lo largo del tiempo? Lo que hoy se puede considerar atractivo (a ojos de la sociedad) mañana puede dejar de serlo y viceversa.

La moda marca la tendencia, tu belleza la marcas tú
Por eso, siéntete bella, siéntete joven, cuida de ti, potencia tus rasgos y sobre todo, tu personalidad. Quiérete y cuida la piel que envuelve tu preciado rostro y tu preciado cuerpo, que es único e inigualable.
¿Eres una jolie laide? Si la respuesta es sí, siéntete afortunada.